La población peruana subió 7.7 kilogramos de peso en promedio durante la pandemia de covid-19, principalmente por el sedentarismo y por el consumo de alimentos altos en calorías que, en la nueva normalidad, son pedidos a través de los delivery.
Así lo señaló a la agencia Andina el decano del Colegio de Nutricionistas del Perú (CNP), Antonio Castillo Carrera, quien precisó que esta cifra -que se desprende de un informe de Ipsos- coloca al Perú en el cuarto lugar con este incremento, siendo superados solo por México, Arabia Saudita y Argentina.
“Al ingresar a estado de cuarentena y estar aislados en sus domicilios, las personas han empezado a cocinar alimentos altamente calóricos, como tortas y queques, se preparan más frituras (o a veces pedidos por delivery), y a ello se suma su estado de inactividad pues también están pendientes de la televisión y videojuegos. Así se incrementa el sedentarismo. Con esos dos ingredientes principales se va cocinando el problema de la obesidad”, indicó.
Dijo, incluso, que desde antes de la pandemia ya existía un alto problema de sobrepeso y obesidad en el Perú, siendo el último registro de un 70% de la población con estos problemas de peso.
De otro lado, Castillo también informó que de las más de 60,000 personas que han fallecido por covid-19 hasta el momento, el 85 % presentaban problemas de obesidad, el 43 % diabetes y el 27 % hipertensión.
Mencionó que estas costumbres de alimentación familiar también influyen en los niños y adolescentes, quienes -además- consumen mayor cantidad de dulces, quedando así expuestos a aumentar de peso.
Cómo tener una vida saludable
Según información del Instituto Nacional de Salud (INS), 4 de cada 5 personas solo realiza actividad física ligera, lo que prácticamente equivale al sedentarismo. En su lugar, el licenciado Antonio Castillo recomienda realizar actividad moderada o alta.
“Es importante cuidar el peso, mantener una alimentación saludable combinando todos los grupos de alimentos. Actividad física no es algo del otro mundo, ayuda a mejorar la salud, nos alivia de la depresión, de la ansiedad, mejora nuestra autoestima y también nuestro rendimiento físico y mental”.
No es difícil hacer actividad física, sostuvo, porque no es necesario acudir al gimnasio; desde casa podemos hacer movimientos y flexiones, e incluso podemos crear algún tipo de movimiento lúdico con la familia para hacer ejercicios.
Sugiero a la población consumir por lo menos un vaso de agua antes, durante y después del ejercicio, a fin de que pueda mejorar su hábito alimenticio.
«También puede incluir dentro de su dieta por lo menos 5 porciones de frutas y verduras. No estamos acostumbrados comer estos alimentos, mucho menos los niños, pero debemos hacer el esfuerzo porque son alimentos con baja caloría y nos proporcionan fibra”, finalizó.