Daniel Bravo Dextre
Este año, la legendaria duna Saraja de gran altura y que desde su cima se puede observar gran parte de la histórica ciudad de Ica, fue elegida como símbolo para la celebración del Día Mundial del Medio Ambiente que se cumplió ayer.
La fecha fue instituida en 1973 por las Naciones Unidas, cuya celebración es dirigida cada 5 de junio por el Programa para el Medio Ambiente -PNUMA- que es la plataforma mundial más grande para la divulgación ambiental. Cada año lo auspicia un país diferente y en este 2022 el anfitrión y organizador es Suecia.
Atendiendo a esta fecha, que es muy importante en la tarea para la preservación de la especie humana a través del cuidado del medio ambiente, en Ica la municipalidad provincial y la Universidad Nacional “San Luis Gonzaga” desarrollaron una campaña de limpieza en el extenso arenal del cerro Saraja, logrando recoger abundante basura, como bolsas y botellas de plástico, latas, papeles y demás desperdicios que dejan los visitantes que escalan hasta la cima para admirar el paisaje urbano y la vegetación que rodea la ciudad del Sol Eterno.
La campaña por parte de la municipalidad provincial de Ica se dio a través de la Gerencia de Protección del Medio Ambiente y Salubridad, con la finalidad de recoger la basura acumulada en las dunas de Saraja y mantener espacios públicos saludables y libres de contaminación.
La UNICA desarrolló la actividad a través de la dirección de Responsabilidad Social Universitaria Proyección Social y Extensión Cultural, en coordinación con la Gerencia municipal del Medio Ambiente, a la que se sumaron alumnos de la Facultad de Ingeniería Ambiental y Sanitaria de la Universidad de Ica.
También se unieron los vecinos de las urbanizaciones aledañas, quienes saludaron las labores y se comprometieron a sumar esfuerzos para mantener estos espacios limpios.
Otros años se hacía esta campaña en las dunas de Huacachina. Esta vez, como el año pasado, le tocó a Saraja y más adelante le podría tocar a La Victoria, La Huega, Orovilca y muchas otras reservas ecológicas iqueñas, donde la mano depredadora del hombre las está exterminando con fierro, ladrillo y cemento.
Reflexión
La ONU, basándose en el lema de la campaña “Tierra sólo hay una”, cada año en esta fecha mundial emite la reflexión indicando que nuestro planeta se enfrenta a una triple emergencia global; mencionando que el clima se calienta a un ritmo demasiado rápido, obligando a que las personas y la naturaleza se adapten; “la pérdida de hábitat y otras presiones sobre la naturaleza han conllevado a que aproximadamente un millón de especies estén en peligro de extinción, y que la contaminación continúa envenenando nuestro aire, tierra y agua”.
Indica que salir de este atolladero implica transformar nuestras economías y sociedades para hacerlas más inclusivas, más justas y más respetuosas con la naturaleza.
En efecto, el medio ambiente es el conjunto de componentes físicos, químicos y biológicos de las personas o de la sociedad en su conjunto. Comprende el conjunto de valores naturales, sociales y culturales existentes en un lugar y en un momento determinado, los cuales influyen en la vida del ser humano y en las generaciones futuras. Es decir, no se trata solo del espacio en el que se desarrolla la vida, sino que también comprende a los seres vivos, objetos, agua, suelo, aire y las relaciones entre ellos.
Por lo tanto, el medio ambiente es el área condicionada para la vida de diferentes seres vivos, donde se incluyen elementos naturales, sociales, así como también componentes naturales; como es el suelo, el agua y el aire ubicados en un lugar y en un momento específico. Su cuidado nos implica a todos, pues su deterioro nos afectará a todos.