Las tradicionales fiestas patronales que se realizan todos los años al interior del país, y que a causa de la pandemia fueron suspendidas por más de dos años, se van reactivando poco a poco, como es el caso de pueblo de Bellavista, provincia de Parinacochas, Ayacucho, que recientemente celebró sus fiestas religiosas por todo lo alto y con una gran presencia de ciudadanos que regresaron a su lugar de origen después de una larga temporada.
Las fiestas patronales de Bellavista, en honor a San Francisco de Asís y la Virgen de Cocharcas, duraron cuatro días y se iniciaron con la entrada de la chamiza, que duró dos días. La tradición consiste en llevar la retama desde los lugares más lejanos hasta el pueblo, donde es quemada durante la noche para calentar el ambiente, en medio de una fiesta popular que fue amenizada por una banda de músicos.
El día central, que generalmente es religioso y social, estuvo a cargo del Guionero, que fue representado por el vecino Vidal Neyra Quispe, quien mandó a oficiar la misa de fiesta, desarrollándose luego la procesión que terminó en gran banquete en su domicilio, con asistencia del pueblo, y baile popular.
Como es de costumbre, las fiestas patronales culminaron con una corrida de toros, pues la tauromaquia está muy enraizada en la provincia de Parinacochas, Paucar del Sara Sara, Puquio y otras ciudades del país, por influencia de los españoles.
De esta manera, el pueblo de Bellavista, que está ubicado a 3,890 msnm, se vistió de gala para disfrutar de la fiesta taurina que se lleva a cabo en honor a San Francisco de Asís y la Virgen de Cocharcas. En esta ocasión participaron siete toros de casta, con picadores banderilleros y matadores de talla internacional que llegaron a este recóndito lugar, gracias al capitán de plaza, el vecino Asterio Mitma Saenz, quien pago los honorarios de los toreros que se lucieron ante gran número de espectadores.
