| Daniel Bravo Dextre
Cerca de 40 efectivos del Frente Policial Ica se graduaron ayer como especialistas y control de disturbios, curso desarrollado dentro de los estándares internacionales en el uso de la fuerza, a fin de disuadir manifestaciones violentas como la toma de carreteras y ataque a la propiedad.
La ceremonia de graduación se realizó desde las 9:15 de la mañana en el Círculo Policial de la Av. J.J. Elías, siendo presidida por el general PNP Manuel Gustavo Vidarte Pérrigo, jefe del Frente Policial Ica; con la participación de jefes de unidades, oficiales y suboficiales PNP, incluyendo familiares.
El III Curso de Capacitación en Procedimientos de Control de Multitudes y Disturbios en el Marco de los Estándares Internacionales del Uso de la Fuerza, tuvo una duración de ocho semanas de preparación académica, teórica y práctica.
Los 39 suboficiales graduados recibieron cursos específicos de capacitación sobre el empleo antimotines, mantenimiento y manipulación de material y equipo de control de disturbios, primeros auxilios, derechos humanos, entre otros, así como preparación psicológica y control emocional.
El responsable del curso, comandante PNP Carlo Rene Zegarra Parra, hizo entrega de diplomas y divisas a los tres primeros puestos: 1° puesto S3 PNP Marco Jesús Tolentino Cárdenas, 2° Puesto S2 PNP Tatiana Ethel Balbuena Zumaeta y 3° puesto S1PNP Fiorella Reynaga Fernández. Luego de ello hubo demostración de lo aprendido.
En las palabras de clausura, el jefe del Frente Policial mencionó que el grupo de efectivos policiales concretiza su anhelo más importante, cual es la formación académica, “que fue la decisión consciente donde se dedicaron al estudio, aprendizaje y conocimientos variados de habilidades teóricas y prácticas, para cumplir un buen servicio a nuestra sociedad”.
La Policía de Ica siempre intentó contar con un grupo de élite antimanifestaciones. Implementó a una veintena de RoboCops que sólo sirvieron para lucirse en los desfiles.
Nuestra policía fue sobrepasada en las recientes tomas de la carretera en Barrio Chino, donde los extremistas hicieron retroceder a los uniformados con lluvia de piedras lanzadas con hondas y huaracas. Los de la DINOES tampoco pudieron neutralizar a los insurgentes que nos hicieron la vida a cuadritos, impidiendo el ingreso de alimentos, el traslado de pacientes y que los fundos de Villacurí exporten sus cosechas.
Imposible que los 39 efectivos graduados logren disuadir a los de la izquierda extrema en caso insistan en el cierre del Congreso o que renuncie la presidenta Dina Boluarte, con el bloqueo de la carretera Panamericana. Llevarlos sería una masacre imperdonable. Lo que sí pueden ayudar en mantener el orden público en la zona urbana de Ica. Hace dos años los revoltosos tuvieron el atrevimiento de corretear a los pacíficos iqueños desde el óvalo del estadio hasta la plaza de armas de Ica, situación de terror que jamás se debe repetir.
