| Daniel Bravo Dextre
Ante una consulta planteada por la DIRESA, la respuesta de Shougang ha sido contundente, en el sentido que la minera no tiene más agua para abastecer al nuevo centro de salud de Marcona en caso éste se construya en el terreno de más de 15 mil m2 que la municipalidad distrital ha independizado del Plan de Vivienda de los sectores A y B.
Es más, en el mismo documento remitido ayer al director regional de Salud Ica, doctor Víctor Montalvo Vásquez, el jefe del Departamento de Relaciones Públicas de Shougang, ingeniero Jesús Monge Pimentel, le pide al funcionario que le exija a la municipalidad distrital de Marcona, representada por su alcalde C.D. Joel Rosales Pacheco, cumpla con adecuarse al Decreto Legislativo Nº 1280 que aprueba la Ley Marco de la Gestión y Prestación de los Servicios de Saneamiento, “formalizando una empresa prestadora de servicios de saneamiento (agua, desagüe y tratamiento de aguas residuales) a la brevedad posible, por ser vital para la salud de las personas, para el desarrollo de Marcona y solucionaría la problemática de falta de agua potable”.
Efectivamente, mediante Oficio Nº 2582-2024, de fecha 27 de junio pasado, el director Víctor Montalvo le solicitó al gerente general de la minera Shougang, Wu Yimin, le informe sobre la existencia de alguna probabilidad para que su representada pueda dotar de agua potable al terreno de más de 15 mil m2 que la municipalidad de Marcona ha independizado y cedido a la DIRESA para Uso de Salud, en el contexto de una ampliación urbana en proceso de saneamiento.
La Comisión de Salud, Vivienda y Saneamiento del Consejo Regional, integrada por los consejeros regionales Angel Macazana Ordóñez, Hernán Herrera Morán y María del Rosario Gamonal Ramos ya tomaron conocimiento de la respuesta de Shougang, en el sentido que si se construye la nueva infraestructura del Centro de Salud “José Paseta Bar” en la expansión urbana de terreno eriazo de los sectores A y B, dicho centro asistencial se convertiría en un “elefante blanco” al no poder ser ocupado por no contar con los servicios básicos de agua y electricidad.
De manera que a todas luces resulta más sensato que el Consejo Regional, dentro de su autonomía y por intermedio de la Comisión de Salud otorgue “luz verde” a la DIRESA para que mediante el mecanismo de Obras por Impuestos proceda a construir el nuevo centro de Salud en el terreno de más de 8, 000 m2, ubicado en el asentamiento humano “San Martín de Porras”, el cual fue cedido por la municipalidad de Nasca y declarado viable por la Dirección Regional de Salud, al estar debidamente saneado en zona urbana y contar con pistas, veredas, agua, desagüe y electricidad, dentro del aporte social de Shougang.
El alcalde Rosales está en todo su derecho de promover la construcción de otro Centro de Salud en los sectores A y B, cuando éstos cuenten con servicios públicos habilitados, lo cual podría darse dentro de dos años.
Lo que no es correcto es que, supuestamente, obstaculice las gestiones de la DIRESA y trate de influenciar en la Comisión de Salud, a efecto que se retrase la construcción de un nuevo centro hospitalario en un terreno viable, sin tener en cuenta que el actual se cae a pedazos por su vieja infraestructura y que médicos y pacientes corren grave peligro por estar en el corazón de una zona sísmica, con movimientos telúricos constantes.
Dirigentes del asentamiento humano, en supuesto acuerdo con el burgomaestre y sin contar con representación vigente (según resolución judicial), a toda costa intentan impedir en la vía judicial que se construya un centro de salud en su jurisdicción, dándole absurda prioridad a un espacio recreativo, cuando la vida de miles de marconenses está en juego y reclaman urgente la construcción de un espacio de atención más seguro y moderno.
Posible denuncia penal
En el supuesto negado que ocurriese una desgracia al desplomarse el viejo local, los familiares de las probables víctimas a quiénes harán responsables penalmente, acaso al alcalde, a los dirigentes cesantes del asentamiento humano o a los miembros del Consejo Regional que se dejaron avasallar por una autoridad edil que incumple la Ley de Saneamiento y no libera los servicios básicos, como lo ha remarcado Shougang por escrito.
El gobierno regional es autónomo y no hay excusa para que adopte decisiones inteligentes. Montalvo tendría que renunciar al cargo en caso los consejeros lo obliguen a distraer recursos del Estado en construir una infraestructura que a corto y mediano plazo no tendrá utilidad. Las obras por impuestos no son una dádiva, es dinero que el MEF dejará de percibir directamente, sino que Marcobre u otra minera lo deducirá o descontará de los impuestos que les corresponde abonar.
De manera que el director de la DIRESA podría ser denunciado penalmente por la Contraloría por el delito de Malversación, al distraer recursos en obras que no tendrán utilidad inmediata, mientras los médicos y pacientes continuarán padeciendo al ocupar ambientes colapsados. Por lo pronto, los dos Frentes de Defensa de Marcona y la prensa independiente nos mantendremos en alerta.