La prostitución clandestina cada vez se torna más peligrosa en la provincia de Ica, no sólo porque eleva el nivel de contagios del covid-19 y de las enfermedades venéreas, sino porque detrás de las féminas operan ahora bandas criminales de extorsionadores que sorprenden a los parroquianos en las redes sociales con mil y un artimañas.
Según fuentes policiales los casos de extorsión cibernética llegarían a más de 100. La mayoría de incautos por temor a las represalias no denuncian los hechos revelando sus nombres de manera anónima, demandando la intervención de la Policía Nacional.
Esta modalidad de extorsión por las redes sociales se ha incrementado en Ica, a raíz del cierre de los prostíbulos formalizados a causa del inicio de la cuarentena por el coronavirus y por haberse penalizado con multas el meretricio callejero.
Muchas trabajadoras sexuales de nacionalidad extranjera se vieron forzadas a retornar a sus países de origen, pero las que se quedaron estuvieron brindado sus servicios íntimos de manera informal, en hoteles, casas particulares y de manera callejera.
A raíz de la ordenanza municipal que fijó multas hasta de una UIT por el ejercicio de la prostitución informal, como una forma de prevenir contagios del mortal coronavirus, cuya penalidad incluye a los establecimientos de hospedaje y a los propios parroquianos, muchos de éstos para satisfacer sus deseos carnales buscaron otras alternativas para captar féminas que se dedican al oficio más antiguo del mundo.
Una de esas alternativas consiste en revisar las redes sociales, donde aparecen fotografías de jóvenes extranjeras muy atractivas. Según el relato de los clientes afectados, ellos eligen una fémina que aparece en el Facebook con ropa interior, las citan al hotel donde previamente se hospedan, pero llega una chica distinta a la elegida. Cuando el parroquiano no la acepta y decide retirarse, en la calle lo espera un sujeto con acento extranjero y lo amenaza con degollarlo, indicándole que tiene que pagar el servicio de todas maneras “porque la trabajadora cumplió con llegar al hostal”.
Otra modalidad es cuando el parroquiano navega por las distintas redes de servicio sexual que se han instalado en Ica, quedando registrada su dirección IP (registro electrónico) y el número de celular; pero, al no contactar ningún servicio a los pocos minutos le llega a su WhatsApp un mensaje intimidatorio, indicándole que ha sido “multado” con 500 o mil soles, “por haberle hecho perder el tiempo a las chicas, preguntándole por sus servicios” y al final quedar en nada.
El sujeto que dice ser el “dueño de la plaza” le dice al incauto que conoce su dirección y que en caso no pagase la “multa” sus sicarios tomarán represalias con su familia.
Operativos
A causa de las diversas denuncias en forma personal y anónima, el Frente Policial Ica, al mando del general PNP Adolfo Valverde Arcos, en los últimos días ha incrementado los operativos contra el meretricio callejero, interviniendo a las extranjeras indocumentadas.
El problema es que las féminas niegan ser damas de compañía, por lo que sólo pasan el control de identidad y a las cuatro horas son liberadas, debido a que muchas de ellas tienen sus papeles en regla.
Frente a esta peligrosa situación que cada vez se le va de las manos a nuestras autoridades, lo ideal en que los ciudadanos varones iqueños se abstengan de captar a las féminas por las redes sociales y no acudir al lugar donde merodean, porque allí también existe peligro de ser asaltados, extorsionados o agredidos, conforme lo ocurrido hace unos días con un mototaxista en la calle Huánuco que por las noches se convierte en “tierra de nadie”, pues las féminas y sus guardaespaldas se disputan violentamente la llamada “plaza” o “parada”. Por suerte, el Escuadrón 105 llegó a disuadirlos. Lo ideal sería filmar a los responsables de estos delitos y expulsarlas del país por representar un serio peligro a la sociedad.
Daniel Bravo Dextre
