| Daniel Bravo Dextre
Los egresados y postulantes a la Universidad Nacional “San Luis Gonzaga” –UNICA- son los más perjudicados en la prolongada toma de locales universitarios, por parte de docentes, trabajadores y alumnos contrarios al rector Anselmo Magallanes Carrillo.
Por lo pronto, los tres mil postulantes del CEPU se quedaron sin rendir la prueba de admisión que estuvo prevista para el 25 de diciembre.
Igual suerte correría los más de 10 mil jóvenes que se alistaban para rendir su examen de admisión ordinario, el cual estuvo programado para febrero del próximo año.
La Comisión Central de Admisión, ante la toma de locales que se produjo el pasado 4 de diciembre, aún no ha podido elaborar el cronograma respectivo debido a que sus miembros se han quedado -literalmente- en la calle.
Los egresados de la Facultad de Medicina y otras especialidades médicas también se han quedado con los crespos hechos, al no poder tramitar sus títulos por la toma que supera las tres semanas.
La insurgencia universitaria también mantiene paralizada la construcción de la Facultad de Obstetricia, debido a que los opositores no permiten el ingreso de personal de la empresa constructora, según informaron fuentes de la UNICA.
La comunidad universitaria espera que la presencia del ministro de Educación, Óscar Becerra, quien ha sido invitado a la Comisión de Educación del Congreso, aclare la situación legal del rector Magallanes, quien es cuestionado por continuar en el cargo, pese a que su mandato concluyó el pasado 1 de setiembre.
El problema es que hasta en dos ocasiones la Sunedu validó la prórroga del mandato del rector, vicerrectores y decanos, por parte de la anterior Asamblea Universitaria.
La Sunedu se encuentra entre la espada y la pared, no sólo por el fallo del TC, sino porque emitió documentos públicos cuando el derogado decreto legislativo que autorizó la prórroga del mandato aún estaba vigente.
Si hoy el asunto no se soluciona en la Comisión de Educación; entonces, tanto Magallanes como sus opositores tendrían que buscar la tutela judicial, lo cual podría tardar algunos meses.
