La presidenta del Banco Central Europeo, Christine Lagarde, ha dicho que “el impacto de la pandemia es menos duro”, pero ha advertido de que la variante delta podría retrasar la apertura total de la economía.
Lagarde afirmó, en rueda de prensa tras la reunión del Consejo de Gobierno, que la economía de la zona del euro repunta claramente, pero el ritmo de mejora dependerá de la evolución de la pandemia.
El BCE reduce el ritmo de compra de deuda en el cuarto trimestre
El Consejo de Gobierno BCE ha decidido -por unanimidad- reducir en el cuarto trimestre el ritmo de las compras semanales de deuda de emergencia frente a la pandemia, respecto a los dos trimestres anteriores, porque han mejorado las condiciones de financiación.
La economía de la zona del euro mantiene la recuperación y la inflación sube. De hecho, el BCE ha revisado notablemente al alza sus pronósticos de crecimiento e inflación para este año.
La entidad compra actualmente unos 94.613 millones de dólares al mes a través de este programa de compras de deuda, que tiene una dotación total de 2,20 billones de dólares.
De momento, el BCE no ha dicho en qué medida va a reducir el ritmo de compra de deuda los últimos meses del año y ha hecho hincapié en que no reduce los estímulos, sino que recompone las compras de deuda, para dar garantías a los mercados de que mantiene apoyos monetarios suficientes.
La variante Delta
“La propagación de la variante delta no ha requerido que se vuelvan a imponer medidas de confinamiento, pero podría ralentizar la recuperación en el comercio global y la reapertura completa de la economía”, dijo Lagarde.
“La fase de rebote en la recuperación de la economía de la zona del euro avanza más. Se espera que la producción vaya a superar su nivel anterior a la pandemia a final del año”, apostilló Lagarde.
“Con más del 70% de los adultos europeos vacunados completamente, la economía se ha abierto en gran medida, permitiendo a los consumidores gastar más y a las empresas aumentar la producción”, según la presidenta del BCE.
El aumento de la inmunidad al coronavirus significa que “el impacto de la pandemia es ahora menos duro”, pero “la propagación en todo el mundo de la variante delta podría retrasar la reapertura completa de la economía”, añadió.
Revisión al alza de los pronósticos de crecimiento e inflación
El BCE considera que la reciente subida de la inflación, que en agosto llegó al 3%, va a ser “en gran parte temporal”.
La entidad prevé que la inflación subirá más en otoño y que caerá el próximo año.
La inflación sube por el fuerte aumento de los precios del petróleo desde mediados del año pasado, que Alemania haya vuelto a elevar el IVA y que la escasez de materiales presiona al alza los costes de producción.
Pero el BCE espera que a lo largo de 2022 estos factores se reducirán.
(Tomado de infobae.com)