Mayoría de supuestos infractores no son sancionados

Autoridades de Ica y distritos estarían permitiendo espectáculos en vivo

Durante la prolongada cuarentena, las municipalidades provinciales y distritales, con apoyo del Ministerio Público y de la Policía Nacional han cumplido una esforzada labor de prevención en la región Ica, haciendo que los ciudadanos, transportistas y conductores de negocios respeten las normas de bioseguridad para evitar la propagación del mortal coronavirus.

En todo esto no tenemos ninguna observación, salvo los hechos extraños que se vendrían dando en los últimos meses en agravio de un empresario iqueño que antes de la pandemia regentaba algunas discotecas; pero, a causa de la cuarentena que se inició en marzo del año pasado se vio forzado a “reinventarse” y cambiar de giro comercial para estar a tono con las normas sanitarías impuestas por el Ejecutivo.

Según hemos podido investigar, en los últimos meses los únicos bar-restaurantes que han sido sancionados con el cierre temporal por una supuesta infracción a las normas sanitarias son el “Move”, “Yapa” y “La Hacienda”, ubicados en el cercado de Ica y distritos, todos regentados por Adán Rojas Bautista.

Sin embargo, otros negocios como “Huaca Fish”, “El Paraíso Iqueño”, “El Paladar Iqueño”, “Macarena”, entre otros, donde se ofrece espectáculos masivos en vivo, además de potajes y licor, sorprendentemente no son amonestados. Existen videos y anuncios con show en vivo de Armonía 10, Los Hnos. Herrera, Embajada Latinoamericana, Marisol, Nilver Aguilar, entre otros artistas que han desfilado por esos escenarios en los últimos días, pero se desconoce si sus promotores han recibido alguna sanción por parte de las autoridades ediles y fiscales.

En diálogo con uno de los abogados del empresario Rojas, nos reveló que esas supuestas infracciones han sido impugnadas en las instancias respectivas; y que incluso existiría queja contra un representante del Ministerio Público por un presunto abuso de autoridad; además, tenemos copia de un audio en que el fiscal emplazado le hace advertencias al supuesto agraviado, en lo que sería un tráfico de influencias para, presuntamente, favorecer a la competencia.

El caso estaría en manos de la Fiscalía de la Nación. Estamos pendiente de resultados.

Al cierre de edición nos enteramos que un pequeño bar-restaurant con 30 personas adentro, el sábado por la noche había sido cerrado temporalmente, por infringir supuestamente normas sanitarias.


Daniel Bravo Dextre

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